Las PC de escritorio Aspire G son máquinas para los jugadores sin pretensiones especiales. Estamos lejos de la serie Predator de la misma marca o de la línea Alienware de Dell, en términos de componentes. A menos 900 dólares, Acer ha tenido que hacer un esfuerzo. De acuerdo con la ficha técnica, la máquina es capaz de ejecutar juegos livianos y sin un componente de gráfico demasiado pesado.
Comencemos con un breve recorrido por el diseño. Acer se inspiró en gran medida en las líneas de su línea Predator, diseñadas específicamente para jugadores. Nos encontramos los colores naranja y negro y esas "mandíbulas" de plástico que se abren y se cierran cuando la bandeja de la lectora óptica entra o sale de la máquina. En la parte superior de la CPU, hay puertos USB y una entrada de 3,5 mm, para un micrófono y auriculares. Por último, los puertos USB traseros son los reyes (diez en total para esta máquina). También hay un puerto Ethernet Gigabit, una tarjeta de sonido 7.1 con salida S/PDIF y las salidas para la tarjeta de video: VGA, HDMI y DVI.
El ventilador de la CPU extrae el aire de las aberturas del panel a través de un tubo de plástico, lo que hace que la máquina sea muy tranquila, y casi no produzca ruidos: la PC produce sólo 33.9 dB en funcionamiento.
Con respecto al procesador (Intel Core i5-650) y a la memoria (4 GB), no hay mucho que agregar. La potencia de cálculo y reactividad de la máquina son muy satisfactorios. Sin embargo, el chip gráfico Nvidia GeForce GT 340 no es el más adecuado para los juegos. A pesar de 1GB de memoria, el chip tiene dificultad para seguir el desarrollo de juegos en Full HD.
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