Después de Nexus One, todos estaban esperando la llegada de Nexus Two. Para promover la nueva versión (2.3) de su sistema operativo Android, Google finalmente eligió el nombre de Nexus S. Con un equipamiento de alta gama, este nuevo teléfono inteligente ha sido diseñado por Samsung, en la línea del Galaxy S.
Este Nexus S no es, tal vez, el mejor equipado en el mercado de los smartphones, pero sin duda juega en las Grandes Ligas. Retoma las principales características del Galaxy S: procesador Cortex A8 de 1 GHz, memoria RAM de 512 MB, pantalla panorámica con una diagonal de 10 cm y un sensor fotográfico de 5 mega píxeles, a lo que se agregan algunos extras: los 16 GB de memoria interna (de los cuales 1 GB está reservado para la instalación de programas) y el flash LED para la cámara.
Fino y liviano, este teléfono adopta, también, el diseño del Galaxy S, especialmente su carcasa de plástico negro brillante, ligeramente redondeada para facilitar la manipulación y el agarre del equipo. Esta carcasa es menos cuadrada, de un negro más profundo, y le confiere al conjunto un aspecto más discreto que no carece de elegancia. En el equipo encontramos, afortunadamente, la tecnología de pantalla Super AMOLED, del fabricante.
Nexus S es el primer dispositivo que integra la versión 2.3 de Android, bautizado Gingerbread (literalmente: pan de jengibre). Dos actualizaciones ya han sido propuestas por Google a los usuarios de este equipo, para arreglar los defectos de menor importancia y los problemas de estabilidad. Esta es la gran ventaja de Nexus: promovido por la empresa de Mountain View, sin incluir ningún tipo de software desarrollado por otro fabricante, es el primero en beneficiarse con los conocimientos técnicos de los desarrolladores de la marca.
Nexus S alcanza más de 10 horas de autonomía en comunicación, más de 8 horas en reproducción de video y alcanza las 5 horas y media en la navegación 3G. Resultados rara vez logrados con Android.
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